HISTORIA DEL SUBMARINO FLUCH



Puerto de Valparaiso en el año de 1865


El día 5 de diciembre de 1865 Chile firmaba un tratado con Perú para luchar contra España.
Así se encontraban las cosas en esta parte del continente, había una infinidad de inventores que ofrecían torpedos, minas eléctricas, buques cigarros ( SUBMARINOS ) que asediaban a toda hora al gobierno chileno, ofreciéndoles sus inventos que destruirían infaliblemente a la escuadra española, que por aquellos días bloqueaba el puerto durante la guerra de Chile y Perú con España.
Uno de elllos fue Flach, quien mostro los planos del submarino y dijo que podria atacar por sorpresa al enemigo. La leyenda dice que, al escuchar la idea, el Presidente Jose Joaquin Perez, pregunto ¿ Y si se Chinga ? ( y si falla ).

Dibujos del Fluch


Flach era ingeniero Alemán, había fabricado cañones de retrocarga que eran una novedad para la época y, por ultimo, Alemania era una potencia militar que ya tenia su propio submarino, así que ¿ por que no ?.
El proyecto prendio rápidamente y le encargaron la construcción de la nave.
Empezó a construirse en la caleta de Torpederas Valparaiso, ya terminado fue remolcado y anclado en la antigua Intendencia Regional ( Plaza Sotomayor ).
El invento de Karl Flach era muy simple. Totalmente hecho de fierro, el submarino tenia una eslora ( largo ) de 12,5 metros, manga (ancho ) 2,5 metros desplazamiento 50 toneladas, velocidad 2 a 3 nudos, profundidad aproximadamente 8 metros, tripulación 11 personas y un peso de 100 toneladas. Tenia un cañón de retrocarga en la proa y un cañón pequeño en la torreta, y una escotilla. Se impulsaba a propulsión humana, con pedales que movían sus dos hélices, y se hundía con un ingenioso sistema de arrastre de pesos de un lado a otro de la nave. Pero no tenia periscopio, por lo que, cada tanto, el submarino debía salir a la superficie para saber si iba en la dirección correcta.





Karl Flach ya había realizado al menos una prueba de inmersión, y esta era la primera vez que se iba a aventurar mas lejos de la costa.
Pero, según registros oficiales de la época Karl no aviso de este ensayo a la Armada de Chile.
Ese día el Alemán llevo a su hijo de 16 años al submarino, ademas intento llevar a una de sus tres hijas, lo que fue impedido por su esposa. Estaba decidido a comprobar hasta donde podía llegar y, según un parte de la Gobernación Marítima, Flach desoyó los consejos del oficial naval a cargo y tampoco permitió que le engancharan una boya a la nave para monitoriar la dirección que llevaba.
Como a las nueve de la mañana empezó su inmersión. Varias veces salio a flote y volvió a bajar, como a las tres de la tarde no se vio salir mas al submarino, la ultima sumersión se hizo cerca del fondeadero de los vapores.
La expectación fue grande, atrapados en un submarino en el fondo de la bahía de Valpariaso, unos dicen que son ocho otros diez hombres- las versiones cambian en los días siguientes- desparecían sin dejar rastro, sepultando uno de los capítulos mas increíbles, la construcción del primer submarino chileno, el segundo de América, el quinto del mundo, a cargo del inmigrante alemán avecindado en Valparaiso Gottfried Cornelius, ese era su verdadero nombre, lo que ocurrió que en 1848, el emperador alemán derroto a quienes pretendían la revolución en su territorio, por lo que Cornelius se ve obligado a adoptar el nombre de un difunto para poder salir de Alemania. De este modo consiguió salir del puerto de Hamburgo el su señora y una hija en el velero Australia llegando a una remota región llamada Corral en Valdivia, con el nombre de Karl von Fluch, después tuvo que suprimir su titulo de nobleza porque en Chile ya no existían.


Gottfried Cornelius y su Hijo

El puerto se repleto de gente curiosa para saber que había pasado con el submarino.
Todo lo que se sabia era que la nave haría una prueba de seis u ocho horas, que en caso extremo podía aguantar hasta catorce horas de inmersión y que la tripulación llevaba víveres.
En la tripulación estaban Karl, su hijo, dos chilenos, dos franceses, y cinco alemanes en total de11 personas, muchos criticaban la temeridad con que se actuó, pues se trataba de una navegación llena de peligros y menos experimentada que los viajes aéreos.
Nunca se supo que sucedió, los diarios de la época especularon con una falla en el sistema de inmersión o que el invento no soporto la presión al sumergirse demasiado y se partió etc etc.
Dos remolcadores y una fragata inglesa intentaron reflotar al submarino, luego que un buzo encontrara el armatoste tumbado en el fango. No hubo caso, varias veces se cortaron las cadenas y las labores se suspendieron. Nadie mas busco la forma de rescatar los cadáveres.
Y hasta el día de hoy aun permanecen en el fondo de la bahía de Valparaiso esperando que algún día salga a flote este intento de primer submarino chileno o permanezca para siempre en el fondo del lodo porteño.


No hay comentarios:

Publicar un comentario