Los mensajeros y dotaciones de embarcaciones usan zapatillas de gimnasia en lugar de zapatos, modalidad que proviene de la necesidad de evitar resbalar mientras cumplen sus obligaciones. A la arriada de la bandera, el mensajero, por tradición cambia sus zapatillas por los zapatos de reglamento, volviéndolas a usar a las 08.00 horas. Las dotaciones de las embarcaciones usan zapatillas, tanto de día como de noche, existiendo constancia de que a comienzos del siglo XX a bordo de la General Baquedano, los grumetes trabajaban sin calzado para afirmarse mejor en cubierta.
Marinero del San Martín Descalzo en Cubierta