Dos compañeros y yo sobrevivimos a un naufragio, nos aferramos durante tres días seguidos a la mitad de una balsa salvavidas. Uno de mis compañeros había sufrido una fractura de la pierna derecha, pero se quejaba poco del dolor. Al fin nos recogieron y nos llevaron a la enfermería del barco. El medico, que desconocía los detalles de nuestra aventura, comento al examinar la pierna fracturada de nuestro compañero:
- Tiene buen aspecto, y no hay indicio de infección. ¿ Que tratamiento ha recibido ?
Sin vacilar, mi compañero dijo:
- La he tenido en remojo en agua salada durante tres días.
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