Hace miles de años vivía en Jerusalén un gallito muy apuesto y altivo con su lindo y abundante plumaje, era orgulloso y cuidaba primorosamente su harén de gallinas, las llamaba cuando encontraba un gusano o un pequeño caracol, emitiendo un pequeño sonido, tambien estaba muy atento a las peleas de las gallinas para poder interrumpir y poder separarlas.
Pero un día apareció un águila en el gallinero donde vivía este gallo, el gallo se asustó, pero recobro al momento su postura, el águila, le dijo no te asustes, no les haré daño, te vengo avisar que en Belén nacerá el hijo de Dios, Jesús, tienes que ir hasta alla para anunciar la buena noticia.
El gallito un poco incrédulo dudo un momento, pero el águila le dijo tu eres luz y tienes que ser el primero en estar ahí. El gallito sacudió sus plumas y tomo el camino hacia Belén.
Corrió el gallito muy apurado no sabia cuanto debía andar, vio que gente se dirigía en esa misma dirección, ¿ toda esta gente ira al nacimiento de Jesús? se pregunto, pero no, el gallito no sabia que toda la gente que se transportaba a Belén iba a un censo romano.
Corrió y corrió el gallito, hasta que se canso, ademas que el camino era muy malo, pensó no voy llegar nunca, pasaban caravanas delante de el, en el cual iban : carros, caballos, camellos, y asnos con familias dirigiéndose a Belén. No pudo mas y corriendo al lado de un burrito le pregunto si lo podía llevar en sus ancas, el burrito asintió con su cabeza y fue así que el tal gallito se encaramo en las ancas del pollino.
Poco antes de llegar a Belén el gallito se bajo del burrito dándole las gracias, a la entrada de Jerusalén se quedo el gallito, aquí esperare a que llegue María y José, el águila le dijo que los reconocería porque ella estaba en cinta y la diferencia de edad que tenia la pareja el ya de edad y ella muy joven.
Fue así que este gallito se dispuso a esperar a esta pareja a la entrada del pueblo de Belén, de repente cabeceaba, pero se reponía y habría sus ojos para no quedarse dormido pasaron varias horas en que pobre gallito esperaba pacientemente la llegada de los viajeros, hasta que por fin diviso una mula en el cual venia una mujer muy joven embarazada y lo tiraba un hombre ya de edad, ellos son, dijo para adentro el gallito, ella irradiaba una luz muy especial. Pasaron delante de el y el gallito los siguió a poca distancia para que que no se percataran de su presencia. Entraron a Belén y José se dirigió a las posadas para buscar alojamiento, pero todo esta completo, no había lugar alguno donde quedarse , recorrieron todo el pueblo pero no hubo caso no encontraron un lugar para alojar.
Un dueño de una posada le ofreció un establo donde podían quedarse ya que todo se encontraba ocupado por las numerosas familias que habían llegado.
Fue así que María y José se instalaron en este establo, donde había un buey echado, el gallito se ubico en un lugar estratégico para pasar desapercibido.
A media noche María se sintió incomoda, llegaba la hora y el niño de Dios nacía al mundo.
Fue así que el gallito subió a lo mas alto de del establo y canto tres veces quiquiriqui, quiquiriqui, quiquiriqui anunciando la llegada del mesías.
María cubrió al niño con unos pañales y lo puso dentro de un pesebre.
Los pastores que se encontraban a las afueras de Belén fueron visitados por un ángel, que les dijo : " Ha Nacido el Salvador ", los pastores bajaron con sus rebaños hasta Belén donde encontraron a María y José y algunos animales alrededor de este pesebre donde se encontraba el niño.
Autor : Jorge Baeza Malatrasi.
" GLORIA A DIOS EN LAS ALTURAS, Y EN LA TIERRA PAZ, Y BUENA VOLUNTAD PARA CON LOS HOMBRES "
LUCAS.
La noche del nacimiento
del verdadero mesías
en las pajas que había
el buey le echó el aliento.
En ese mismo momento
la mula lo manoteó
el gallo le anunció
que el niño iba a nacer
y en el portal de Belén
a la una nací yo.
Para Pintar